«Si te miran, haz que no puedan dejar de hacerlo».
Seer
Artista de la emboscada
Antes de su nacimiento, se predijo que Seer traería dolor y sufrimiento al mundo. La noche que nació, un meteorito atravesó el cielo e impactó en la luna de su mundo. Se consideró un mal presagio y, cuando los ojos azul pálido de Obi Edolasim se abrieron, su comunidad vio a un niño maldito. No era así para sus padres, que lo adoraban incondicionalmente porque veían el alma creativa y empática de su hijo. Incluso le apoyaron cuando se sintió atraído por la teatralidad de las Arenas, donde podía expresarse por completo.
Al principio, al público no acababa de gustarle. Pero con el tiempo, con cada victoria, el poder que llevaba dentro creció y, con él, su fuerza en las Arenas. Y, cuando su reputación empezó a extenderse, pasó algo raro... El público abatido, marginado y olvidado se veía reflejado en Seer. En un visto y no visto, multitud de personas se acercaban para verlo luchar y animaban a Seer como su campeón. Esta leyenda de las Arenas se abrió paso hasta los Juegos Apex como icono de los malditos, los inaceptados y los descaradamente originales. Todavía hay quienes lo culpan del deterioro de la luna de su planeta (Boreas) por muchas razones: su maldición, la poca ayuda que brindó a los habitantes de Boreas y ahora por traer los Juegos a la luna. Lucha como puede para enderezar las cosas.
<b>Reconocimiento</b>
- Escanea balizas de reconocimiento para revelar las posiciones enemigas durante un breve periodo de tiempo.
<b>Foco de atención</b>
Seer convoca a sus microdrones para emitir una explosión retardada que atraviesa los muros e interrumpe a los enemigos y muestra sus posiciones.
<b>Buscacorazones</b>
Escucha y visualiza los latidos de los enemigos cercanos al apuntar con la mira.
<b>Exhibición</b>
Crea una esfera de microdrones que revelan la ubicación de los enemigos que se muevan rápidamente o disparen armas en su interior.